Harry Potter, la verdad sobre su mágico prestigio

Mucho se ha dicho cual es la razón por la que una serie de libros como Harry Potter ha tomado una gran fama, muchas teorías existen, algunas muy raras, y otras muy denigrantes, incluso al grado de llegar a las acusaciones de satanismo, o brujería tras el éxito de la saga. Más seguro es que todas estas reacciones han resultado de ayuda a la obra, para que los lectores entraran en contacto con la esta, y que no han manchado la gran fama de la misma, por no haber logrado dañarla, en base a argumentos falsos.

Las dudas se hacen mayores al saber de J. K. Rowling, la autora de esta sorprendente saga, era hasta entonces una persona si bien ilustrada en el arte literario y de las letras, profesionista, maestra de idiomas, es el hecho de que nunca había escrito una novela, o cuando menos, algo dirigido en forma literaria, siendo una perfecta desconocida en el mundo editorial.

Muchos lo consideran suerte de principiantes, pero la verdad no fue fácil llegar, ya que para la llegada de Harry Potter al mercado, hubo un gran esfuerzo, de un gran equipo, con un aprovechamiento de todos los recursos disponibles, con una idea firme, de dar a conocer un excelente producto. Se tuvieron que romper muchas ideologías, esquemas, tendencias, obstáculos, etc. Y es que después de todo, la apuesta hacia este nuevo producto editorial tenia bases, estaba sustentada, mas rompía con el estándar del momento, este mismo estándar que mantuvo a muchas grandes obras de ficción casi ocultas por décadas y que con el efecto Harry Potter le ayudaron a representar Best-Sellers el dia de hoy, como lo son Las crónicas de Narnia y El Señor de los Anillos, de gran envergadura, y éxito en su momento, pero mantenidas en bajo perfil por años, asi también como otras, que en parte deben su éxito a la llegada de Harry Potter al éxito previamente. Después de todo, estas obras representan por hoy algunos de los mayores Best-Sellers del mundo, por debajo de muy pocas obras como la Biblia, y arriba de muchos autores clásicos.

Hoy, a pocos meses de terminar las últimas entregas fílmicas de la saga Harry Potter, ya habiendo concluido hace tiempo la aparición de los tomos de la obra, son pocas las preguntas que quizá no se han contestado, después de todo J. K. Rowling, ha sido de las mejores defensoras de marca en mucho tiempo, o cuando menos en el mundo editorial, cuidando todo detalle, todo por el bien de la marca, teniendo idea perfecta del rumbo a seguir y de toda la información existente para mantener fresca y con efecto positivo a la propia, contribuyendo a ser esta una de las marcas mejor valuadas del mundo empresarial internacional, por estas y muchas más justas razones.

Libros, compendios, enciclopedias, investigaciones, mercancía, e incluso un parque de diversiones, así como otros elementos, han dotado de mayor fuerza a la marca. Hay que mencionar adicionalmente que diversos autores de todo tipo de estudios, ramos y tendencias, han argumentado sobre el éxito de la saga, desmitificando las razones del éxito de la saga, y demostrando que el éxito de Harry Potter, se debe a todos los esfuerzos de mercadotecnia, las superproducciones fílmicas, y el apoyo de editoriales con fuerza y gran visión en el mundo, así como los esfuerzos de la Warner Brothers y sus compañías asociadas, las que han avalado por justa razón a un gran producto, que es resultado de la creatividad, inteligencia, años de investigación, un gran trabajo de formación de elementos, cuidado total de los detalles, así como de esfuerzo y de compromiso, que creó una de las mejores tramas, muy completa y compleja, que creó la Magia de Harry Potter. En conclusión no hay Magia en el éxito de Harry Potter, solo es el resultado de un inmenso pero bien dirigido esfuerzo multidisciplinario, que inicio con la imaginación de una gran mujer, J. K. Rowling.